En la minga de recuperación de cobertura vegetal participaron 102 personas.

Más de 1.000 plantas fueron sembradas en el bosque seco andino ecuatoriano

La pérdida del espacio verde y de bosques es una de las grandes preocupaciones en la lucha contra el calentamiento global, debido a que los árboles son los pulmones naturales del planeta.

Ante este panorama, diversas empresas y organizaciones efectúan jornadas de reforestación. Una de ellas REM Ecuador, que realizó una minga de recuperación de cobertura vegetal en áreas degradadas del bosque seco andino que se encontraba en proceso de desertificación y erosión.

En total, se sembraron 1.100 plantas nativas, como guarango, nogal y cholán. «Así contribuimos a la protección de fuentes de agua del sector la Calera, de la comunidad de San Francisco de Tumbabiro, cantón Urcuquí, y a la generación de corredores de interconexión como relictos de guarango y quebradas», destacó la organización.

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En esta actividad participaron 102 personas de la comunidad de San Francisco de Tumbabiro, Junta de Agua, la Red Bosandino, la Junta Parroquial de Tumbabiro y el personal técnico del Proyecto Guarango.

La iniciativa, que tiene como ejes establecer negocios, asociatividad y restauración del bosque seco andino, es ejecutada por el REM Ecuador, del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, cuya co-ejecución la realiza la Heifer Ecuador.

El financiamiento proviene de los gobiernos de Alemania y Noruega, bajo el mecanismo de pago por resultados, por la reducción de tasas de deforestación en el territorio continental. Los recursos económicos son administrados por el Fondo de Inversión Ambiental Sostenible (FIAS).

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